Una de las consultas que más han aumentado en los centros de neuropsicología clínica en Oviedo tiene que ver con un síndrome poco familiar para la mayoría hasta hace unos años. Hablamos del síndrome de Asperger, un trastorno del desarrollo que se engloba en lo que llamamos el espectro autista. Pero ¿cómo podemos detectar si nuestro hijo lo padece?
Muchos padres que acuden a un centro de neuropsicología clínica en Oviedo relatan una serie de rasgos en sus hijos que les resultan preocupantes. Uno de los más destacables se refiere a la dificultad para relacionarse normalmente con otros niños, ya que muestran escasas habilidades sociales. Estos niños no interpretan bien las señales sociales y, en consecuencia, no pueden ofrecer la respuesta emocional adecuada. Resultado de esto es la dificultad para hacer amigos, que puede conducir a cierto rechazo por parte de otros niños y a un aislamiento social traumático.
La comunicación es también un ámbito que suele ofrecer problemas en el niño con Asperger. Los padres observan que a su hijo le cuesta entender totalmente un mensaje, ya sea verbal o no verbal. Son niños que han aprendido a hablar tarde y que a veces usan frases memorizadas y fuera de contexto.
Otro rasgo a tener en cuenta es el desarrollo de rutinas inflexibles, como pequeños rituales, por parte del niño. Para ellos todo debe estar controlado y sujeto a una repetición que les permite entender mejor una actividad.
Con todo, un diagnóstico precoz ayudará a niños y padres a emprender la mejor estrategia. Si crees que tu hijo presenta alguno de estos síntomas y necesitas la valoración de un experto, en Centro Goa podemos orientarte e iniciar un tratamiento eficaz para que tu pequeño afronte su futuro con la máxima confianza, y los padres con la máxima tranquilidad y optimismo.